
Ya no me voy a esconder. Yo al contrario que el Sr. Scrooge, estoy poseída por el fantasma de la Navidad. Mientras conduzco mi vida hacia el final de este año no puedo evitar mirar por el retrovisor. Todavía se ve mucho paisaje por detrás. Éste ha sido sin duda un año de los importantes. El año en el que me convertí en lo que soy para vosotros, la Sra. Maple.
La Navidad para mí empieza con un niño recién nacido luchando en el hospital. Con sus padres con el corazón encogido hasta conseguir verlo en casa. Fuerza Mateo! Sigue leyendo