Hace poco más de un mes estábamos en Japón, pero pudimos no haber salido vivos de allí. Después de haber pasado 15 días entre individuos de ojos rasgados, un calor más propio del Sáhara y trenes de alta velocidad, aprendimos unas cuantas lecciones que hoy les comparto. Si se deciden a visitar el país nipón no digan que no se lo advertí. Sigue leyendo
